martes, 3 de febrero de 2015

Peli de Oscar

El sábado fue el primer día que el pequeño Pixel se quedaba un rato lejos de su madre al cuidado de un servidor. Aún recuerdo cuando escribí sobre aquella primera noche con Chewy, menudo combate, pero esta vez eran dos y como no me vi ni física ni psicológicamente preparado, porque claramente me ganaban en número, pedimos ayuda a la tía Shery, muy predispuesta siempre. Con este panorama me imaginaba una noche en mi cabeza, pero el destino es caprichoso y mi hijo más, y en realidad me esperaba una buena...

EN MI CABEZA...

Tenía todo lo necesario para plantear un día de diversión, dentro de lo que se puede hacer con un bebé de 5 meses y medio. La primera parte de la noche nos centraríamos en cenas, todo organizado, primero para cenar una pizza casera, cena que no defrauda nunca, para los dentados y después le daríamos la leche que nos había dejado la madre al desdentado, siempre que lo necesitara, todo en su preciso momento.

Tras la cena, la tía Shery se dispondría a entretener a Chewy mientras yo dormía al pequeño en su mochila, unos cuantos paseos y KO, pan comido. Después un poco de peli para la mayor y a dormir también. Con esto ya podríamos ver una buena peli, una de las nominadas a los Oscars, la tía, yo y una buena palangana de palomitas, Mrs. nos había dado permiso para ello ya que ella no aguanta ni media serie la pobre. Esa sería la escena que encontraría la santa madre a su vuelta, yo orgulloso por haberlo conseguido para que vea que puede descansar de vez en cuando.

EN REALIDAD...

La primera hora de ausencia materna todo fueron risas y juegos, llegamos a la cena con la pizza casera al aire de pavo y todo marchaba sobre ruedas. 

Tras la cena, Pixel se empezó a impacientar y aunque la madre me dijo que esperara porque había comido, yo veía que mi pobre guacho tenía hambruna, así que le preparé una degustación de leche de teta con reducción de cereal para que le llenara el buche más. Razón no me faltó porque se relamía con cada cucharada y disfrutaba con el manjar que le había preparado, hasta que tropezamos con un pequeño problema. Los 100 mililitros y las seis cucharadas de cereal parecía que no le fueron suficientes, él miraba ese cuenco vacío con gana, y allí, amigos, no había nada.

El pobre Oscar sufrirá con esa mochila seguro
Corrimos un tupido velo y nos dispusimos a seguir nuestra noche, previo paso informativo a la madre vía wasap con imagen incluida para que cenara tranquila. Al cabo de una hora empezaron las quejas del pequeño y con ellas, el fin de nuestra noche. En la primera parte intenté calmarle, me puse la mochila, paseo, meneo, giro y vuelta a empezar… así a lo Homer Simpson "arranca, freno, claxón…arranca, freno, claxón" pero no caía el jodío y encima lloraba. Ante la desesperación pedí cambio y entró mi sustituto al campo de juego. Tía Shery hizo lo propio pero el condenao seguía dando el do de pecho, serenata que fue acompañada con sumo gusto por su hermana porque no podía seguir jugando.

Tras una hora aproximadamente de ópera cantada y un mensajito de mi señora, decidí que había que informar para que viniera, pero claro, le quedaba media hora de camino y no podía tener al pobre niño cantando hasta entonces. Ni corto ni perezoso, cogí un plátano y se lo acerqué a la boca, algo había que probar. Al pobre se le iluminó la cara, cogía la fruta con ahínco y le daba unos bocaos de aúpa, estaba canino, no andaba yo muy descaminado. Se calzó medio plátano con esas encías de abuelete, el primero que probaba, y después de eso, se durmió. Eran las 23:45 más o menos y a mi me parecían las 4 de la mañana.

Sobra decir que allí no dormía nadie y por supuesto no pudimos acostar a la mayor que miraba con asombro cómo dos adultos no bastaban para reducir a un pequeño bebé goblin.

Mrs. P says: Virgen santa cuando entré en casa no me creía lo que estaba viendo. El padre tirado en el sofá que parecía que le habían pegado una paliza, tía Shery con un niño descoyuntao en el balancín de casa que llevaba además unas morreras con cosas pegajosas alrededor, la padawan corriendo por el pasillo y diciendo que habían venido los Goblins y la casa...en fin, en casa parecía que había venido alguien más que los puñeteros Goblins, allí había habido una fiesta con David Bowie cantando como poco. Todo eso en tres horas y media.

Ahora todos somos Goblins en casa para Chewy

13 comentarios:

  1. Viendo la solución platanil, creo que estás preparado para volver a quedarte sólo con los dos churumbeles en cualquier momento.

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  2. jajajajajajaja

    Seguro que la 2da vez será mejor ! (si la hay, claro) xD

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  3. Jajajajajajaja ¡Qué grandes! Imagino tu cara, Mrs., al entrar a casa como la de Antonio Banderas en la escena final de su parte en Four Rooms XDDD
    Ahora, tengo que decir que qué maestría la de Mr. con la maniobra "plátano salvation". Tremendo.

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  4. me estoy meando y llorando de la risa! menuda noche! qué descojone! si es que me imagino al mister loco perdio jajaja!
    y el plátano, olé tú! toma tío resuelto, más apañao que las pesetas! jajajaja!
    si es que no se puede salir de casa con estos niños tragoncetes! gracias por las risas! jajajjaa

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  5. El plátano, es lo más vital...Mamá naturaleza te lo da!

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  6. Ji ji, que grande lo del plátano! Menuda nochecita!

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  7. Jajajaja, me parto, muy buena solución!!! A la próxima un trozo de pan! A nosotros nos ha pasado eso dos veces, una con 5 meses yo estaba cenando al lado de casa y salí zumbando dejando a deber mi parte :(, la segunda fue en navidades con 18 meses y se despertó 15 minutos antes de yo llegar... Estos bebés...

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  8. Al final la culpa de la madre por no haber dejado más leche!
    La cara de Chewy, pa verla!!!!

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  9. Jajaja, pero mereció la pena, ¿¿verdad Mrs P??

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  10. No puedo creer que el pequeñajo de la casa haya podido con un adulto y con una mujer, no me lo puedo creer!!!

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  11. Jaja! Tengo la escena en la cabeza!! Madre mía qué risas me he echado... y me apunto lo del plátano porque aquí MNB lleva unos días... Un abrazo

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  12. yo lo que no entiendo es por qué te hizo volver si ya el plátano lo había solucionado todo!!! xD

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  13. Moraleja de sabio: cuando el mundo colapse y entre en el caos del apocalipsis final... ¡No olvides tener a mano un buen plátano!

    ¡Esto quedará para los anales personales de Píxel!

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