El Hobbit: un cine esperado

Ayer por fin fuimos al cine!

Hacía ya 8 meses, desde el estreno de los Vengadores que no visitábamos una sala de cine y eso que nos pirra. Entre el precio al que están las entradas y que no hubo ningún estreno pre-parto que nos pareciese digno del desembolso que cuesta ahora el cine pues… nos esperábamos a sus respectivas versiones online.

Así que tras semanas y semanas de dorarle la píldora a mi mujer para que viniese conmigo (disfruto más con ella), por fin, 48 horas antes del estreno accedió a venir. Cabe decir que era la primera salida juntos desde que nació la niña y teníamos el handicap de tener que dejar sola a la criatura con la loca de la abuela, algún día tenía que ser el primero.

Compramos las entradas el día anterior para que así no hubiese ocasión de echarse para atrás (ella, yo iba a ir igual si no) y porque además el cine era en HFR 3, he de decir que aunque al principio te cuesta un poco acostumbrarte a este tipo de imagen tan real, pasados los primeros 10 minutos la película resulta una pasada, no sin antes escuchar comentarios de la cuñada y de la madre diciendo que parecía un documental o que se veían los escenarios como miniaturas, luego acabaron dándome la razón.

Pues bien, la película empezaba a las 19.15h y a las 18:30h la abuela aún no había llegado, llovía en Madrid, Mrs. P no se había vestido, Chewy dormía plácidamente y aún la tenía que alimentar su madre. Resultado, yo a punto del infarto cardiaco porque me gusta llegar a los sitios un poco antes y sobre todo ver los trailers, que los disfruto casi tanto como la película en sí. A las 18:50 la madre empezó a darle el pecho a la cría y yo mientras poniéndole las botas, no os digo más. Menos mal que el cine está al laito de casa y me salté todos los puñeteros semáforos inservibles del barrio, juro que no valen pa ná! Eso sí, me perdí los trailers.

En el apartado técnico, como os decía el HFR 3D es  lo mejor que he visto, merece la pena cada céntimo. En cuanto a la historia, puede que a los más puristas de Tolkien (aquellos que no perdonaron que no saliese Tom Bombadil en ESDLA), haya partes que no les gusten ya que son invención de los guionistas o de los apéndices del Silmarillion, pero hacen más intensa y divertida la historia, ya que sino quedaría un poco floja esta primera parte. Tarda un poco en arrancar pero cuando lo hace (a la media hora)  es vibrante y entretenida a más no poder, lo mejor que he visto este año, aunque ha sido poco.

Solo tengo dos pegas con respecto a la película, una, que haya que esperar un año para ver la segunda, otro gordo cabrón que nos hace esperar, y dos que en el puto cine tengan la calefacción a 100 grados y esté todo el mundo medio en bolas, esto hizo que la disfrutásemos un poquito menos y se te quiten las ganas de volver.


Tras 2h y 45 min. (que no se hacen para nada largas) de trasgos, orcos, trolls, huargos, elfos, enanos, hobbits, humanos y el irrepetible Gollum, de lo mejor de la película, salimos corriendo con el culo sudandero para llegar lo antes posible a casa y comprobar como la abuela se había pasado por el forro todas nuestras indicaciones, aunque entendemos que más por inseguridad que por mala fe. No entraré en detalle, sólo diré que cuando se fue revisamos de arriba a abajo a littlefriki porque nos acordamos del capítulo de Friends donde Rachel y Mónica se quedan con Ben y le dan un golpe en la viga del piso. mítico. Verificamos que no había contusiones ni laceraciones y procedimos a intentar dormirla lo cual nos costó un huevo y parte de otro porque estaba nerviosilla.

Finalmente con el cansancio que te deja un día cargado de ilusiones y tu hija pasillo arriba pasillo abajo, nos fuimos a la cama con el buen sabor de boca que pocas películas te dejan hoy en día. Aún hoy disfruto y estoy deseando verla en versión original.

Ya estáis tardando en ir a verla aunque no seáis fans de Tolkien, porque es una buena historia de aventuras, de las que te atrapan y no te sueltan. En Resumen, y como diría Gandalf, ¡corred insensatos! a verla a vuestros cines.

Mrs. P says: me costó decidirme pero menos mal que fui porque soportar al bendito y a la hermanísima a la salida restregándome lo que hubiera sido me habría rematao, una tiene su friki dentro también y este fue de mis primeros libros. De la película me quedo con todo, pero añado otra fase del gurú Gandalf el gris: son los pequeños actos de amor los que mantienen a ralla el mal. Ahí lo dejo.